Yetaque Dupade nanique
Testimonio de Dapuré:
Voy a dar mi testimonio: Te hablaré de mí mismo. No voy a contar acerca de cuando estábamos en las selvas, pero hablaré después de que llegamos a un lugar llamado Tobité.
Yo odiaba a Dupade: Realmente odiaba a Dupade en aquel tiempo. Yo no era como las otras mujeres que tan pronto amaban a Dupade. Lo odiaba, lo despreciaba.
Enterré a mis bebés vivos: Maté a mis bebés. Maté a dos de ellos.
La señorita Eva me dijo: “Dapuré, ¿has oído hablar de la Palabra de Dupade?
Yo dije: “Eva, no he oído nada de las Palabras de Dupade. No hay Dupade.”
Eva me habló. Ella dijo: “Bueno, Dapuré, ¿sabías que Dupade existe, y él está arriba en el cielo?”
Pero yo dije: “Eva, por supuesto que lo sé, pero no hay Dupade en absoluto. No hay cielo; si lo hay, está lejos. El cielo está muy lejos, y allí no existe un Dupade.
Ahora creo en Dupade: Pero ahora saben las mujeres, mis compatriotas, que sólo recientemente he llegado a creer en Dupade. Aunque casi no lo hice. Me han arrojado al agua. Quería ser bautizada porque ahora creo en Dupade. Y creo en el Hijo de Dupade.”
Ahora rezo a Dupade: Señora Marina me dijo: “Dapuré, sería bueno que ores.”
Yo dije: “Señora Marina, es cierto, voy a orar.” Y ahora sé orar.
Ella me dijo: “Es muy lindo que ahora ores a Dupade. Ahora debes dejar de hacer las cosas que hiciste antes. No mates a tus bebés, como solías hacer.”
Y me detuve. Dejé de hacer las cosas malas que solía hacer antes de creer en Dupade. Me detuve porque creía en Dupade. Realmente creo en él ahora. Tengo fe en él. Y me siento muy feliz. Siempre voy a las reuniones para oír la Palabra de Dupade.
Señora Marina probablemente oirá estas palabras mías, que no he dejado de ir a las reuniones. Estaría muy triste si yo hubiera dejado de seguir a Dupade. Pero se alegrará cuando oye que no nos falta ir a las reuniones para escuchar de la Palabra de Dupade. Siempre vamos los domingos. Y después de eso, vamos los sábados también.
Las mujeres, sin embargo, todavía peleamos entre nosotros: Yuni me habló recientemente y me dijo: “Madre, como si no supieras lo que dice la Palabra de Dupade. Ustedes las mujeres siempre están reprendiéndose y criticándose. Sólo Davidaté no regaña a los demás.” (2 Corintios 5:17)
Esto es todo lo que tengo que decir.
Clave:
Dupade – Dios
La Palabra de Dupade – La Palabra de Dios
Lanza a alguien al agua – Bautizar a una persona
Dapuré – Tobité, Bolivia – agosto de 1975.
Transcrito y traducido al español por: Maxine Morarie.